Como todo en estos tiempos, el mundo deportivo cada día exige más y más a sus participantes, tanto así que los nuevos deportistas comienzan a destacar a edades más tempranas que las de sus predecesores. A esta situación se le puede ver un lado positivo, ya que al comenzar a triunfar a más temprana edad, la vida activa de los deportistas incrementa y los seguidores podemos disfrutarlos más tiempo. 

Esto es lo que pasa con la joven estrella del tenis Naomi Osaka, quien a sus 22 años de edad ya figura como la próxima súper estrella del deporte blanco. 

Esta joven tenista nació el 16 de octubre de 1997 en Osaka, Japón y es hija de padre haitiano y madre japonesa. Por el momento reside en Florida, Estados Unidos, pero representa a Japón en todas las competencias. 

La joven asiática debutó en la WTA Tour en 2014. El 18 de marzo de 2018 se alzó con el primer título de su carrera al vencer en la Final del Torneo de Indian Wells a la rusa Daria Kasatkina por 6-3 y 6-2. 

La hazaña más grande de esta tenista fue en 2018, pues a sus 20 años alcanzó la final del Abierto de los Estados Unidos y derrotó a la local Serena Williams por 6-2, 6-4. A partir de esta actuación y de su primer título obtenido en el WTA Premier de Indian Wells más temprano ese mismo año, entre otros resultados, logró su mejor ranking al ubicarse como la 4ª en la clasificación individual de la WTA.

En 2019, en el Grand Slam, Osaka alcanzó su segundo título de esta categoría y de forma consecutiva. Gracias a su esfuerzo, Naomi se convertiría así en la 26ª número 1 de la historia, primera japonesa en lograrlo, así como también, la primera asiática.

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