El sábado 21 de abril se llevó a cabo el último partido del Cruz Azul en el inmueble que fue su casa por 22 años: el Estadio Azul, del cual salió victorioso y se llevó los tres puntos frente al Morelia.
El inmueble fue inaugurado en 1946, e inicialmente fue utilizado para la práctica del fútbol americano, y en su cancha se vivieron muchos grandes momentos, como el primer partido de la NFL fuera de los Estados Unidos.
En 1983 se convirtió en la casa del Atlante, aunque otros equipos como el América y el Necaxa, también jugaron como locales en ese estadio, durante algún tiempo. Ya en 1996 pasó a ser la casa del Cruz Azul y de ahí recibió su nombre de Estadio Azul.
Su desaparición sucede, pese a la oposición de los vecinos de la zona, quienes consideran esto innecesario. Con la intención de agilizar toda la labor, se pretende adelantar la temporada de toros, para así usar el túnel que conecta el recinto con la plaza de Toros México, para sacar todos los escombros.
El Estadio Azul se convertirá en un centro comercial, similar al que actualmente se construye en Periférico Sur. El nombre será «Artz de Insurgentes Sur,» y pretende integrar marcas de lujo como Louis Vuitton y Gucci, y además contará con cuatro torres corporativas.