El pasado domingo 13 de Agosto del 2017, fuimos testigos de un momento histórico para México, protagonizado por una atleta que es merecedora de todo el reconocimiento, los aplausos y el orgullo de los mexicanos.
María Guadalupe González Romero, plasmó su nombre en la historia, al llevarse por segunda ocasión consecutiva, la medalla de plata en marcha de 20 kilómetros, durante el Mundial de Atletismo, llevado a cabo en Londres. Cabe mencionar que Lupita y la legendaria Ana Gabriela Guevara, son las únicas mujeres mexicanas que han ganado medallas en Mundiales de Atletismo (Ana Gabriela ganó un oro y dos bronces en la competencia de 400 metros).
Nuestra querida Lupita repitió la hazaña que consiguió durante los Juegos Olímpicos de Río 2016, cuando ganó la primera medalla de plata para México en marcha femenina, subiéndose al podio junto con Liu Hong y Lu Xiuzhi, ambas originarias de China.
Lupita comenzó su carrera deportiva como boxeadora, llegando a una final del torneo Guantes de Oro, desgraciadamente la mexicana no pudo continuar con su sueño, debido a que tuvo problemas para subir de peso, lo cual le impidió seguir con su carrera sobre el ring.
Posteriormente encontró refugio en el atletismo, siguiendo a grandes como Ana Gabriela Guevara, aunque la vida la puso a prueba otra vez cuando se lesionó los meniscos y tuvo que guardar reposo por varios meses. Muchos médicos juraron que Lupita no podría volver a practicar ningún deporte, pero su perseverancia los convenció de todo lo contrario.
Después de recuperarse, Lupita invirtió todo su tiempo y esfuerzo para convertirse en una grande del atletismo. Durante el Campeonato Centroamericano y del Caribe, celebrado en Morelia, Michoacán, durante 2013, Lupita salió campeona de 10 kilómetros; posteriormente ganó medalla de plata en el Mundial de Atletismo, Roma 2016; llegó con el segundo mejor tiempo de todo el año a las Olimpiadas de Río y el resto es historia pura.
Contrario a lo que muchos pudieran pensar, Lupita no se siente satisfecha con la plata conseguida en el Mundial de Londres 2017, ya que asegura que se ha estado preparando arduamente para convertirse en campeona.
“Otra vez lo mismo. Desafortunadamente esta vez pensé que podía responder al final. Me falta trabajar más. Todavía me falta algo para el oro.”
“Una vez más se repite el papel. En Rio fue una plata que me dolió, por dos segundos. Nuevamente no se ha podido al final. Me queda trabajar para ser más fuerte.”
Es así como Lupita González continúa sorprendiéndonos, a pesar de que no cuenta con el apoyo de grandes organizaciones como la CONADE, ni con la cobertura mediática de todos los medios de comunicación. Lupita es el vivo ejemplo de que cuando se quiere, se puede.