Era 2006 y ningún aficionado al fútbol mexicano podría imaginarse que el equipo más importante del país, estaría ganando su último título en más de una década. Once años tuvieron que pasar para que las Chivas, volvieran a alcanzar la gloria y con ella, la doceava estrella de su historia.

El Club Deportivo Guadalajara fue fundado el 8 de mayo de 1906, dando inicio a una era deportiva, la cual estaría basada en el éxito, y en emplear solamente a jugadores mexicanos para alcanzarlo. Esta ha sido una de las políticas que ha distinguido al club, pero que también le ha impuesto un esfuerzo extra para ponerse a la par de todos los demás clubes, los cuales tienen la oportunidad de fichar jugadores extranjeros.

A pesar de que durante sus inicios, Chivas se distinguía por un estilo de juego perfectamente definido, fue hasta 1956 cuando comenzó su mejor época: la etapa del Campeonísimo; entre 1956 y 1965, el Guadalajara consiguió siete títulos de liga, seis trofeos de campeón de campeones, una copa, un campeonato centroamericano y un campeonato de la CONCACAF. Gracias a todos estos títulos, la prensa y la fanaticada lo bautizó como el “Campeonísimo”, apodo que definiría la identidad del club hasta nuestros días.

Durante la segunda mitad de la década de los sesenta, Chivas bajó su rendimiento, hasta que llegó la temporada 1969–1970, durante la cual logró consagrarse nuevamente como campeón de liga y copa.

Tristemente tuvieron que pasar más de quince años para que el Guadalajara retomara su lugar dentro del fútbol mexicano, ya que durante la década de los setenta, el club pasó por una crisis deportiva e institucional, crisis que fue superada hasta 1982, y que fue totalmente olvidada con el noveno título de liga, ganado durante la temporada 1986–1987.

Después de pasar por una crisis financiera, al inicio de la década de los noventa, (la cual los limitó y condicionó, a la hora de fichar jugadores nuevos), las Chivas volvieron a coronarse como campeones durante el de Verano 1997, logro que significó la décima estrella para la institución.

Tras varios años llenos de altibajos, fue hasta 2002, cuando después de múltiples problemas institucionales y económicos, el empresario Jorge Vergara decidió comprar la mayoría de las acciones del Club Deportivo Guadalajara, lo que provocó que la institución dejara de ser una asociación civil. Con su llegada, Vergara cambió radicalmente la imagen y la filosofía del club, aunque los resultados no fueron inmediatos, porque fue hasta 2006 –año del centenario de la institución– cuando Chivas volvió a convertirse en campeón del fútbol mexicano.

Con su onceava estrella, Chivas se consolidó como el equipo más ganador de México, seguido por América y Toluca. Claramente, dentro del mundo futbolístico, los éxitos no son eternos y a partir del 2009, Chivas cayó en una racha llena de malos resultados, que llevaría al equipo al borde del descenso.

Jorge Vergara tuvo que vaciar sus bolsillos, lo que significó comprar 27 jugadores, del 2006 al 2017; la inversión del empresario fue de aproximadamente 120.5 millones de dólares, aunque fueron pocos los fichajes que realmente ayudaron al club a salir del hoyo.

Fueron once años de sufrimiento e incertidumbre para los aficionados rojiblancos; once años en los cuales pasaron diferentes entrenadores, asesores y directores deportivos; once años en los que muchos creyeron que Chivas no podría levantarse.

Pero después de tanto esperar, llegó el día que el fútbol mexicano esperaba. Tras pasar a la liguilla, en cuarto lugar de la tabla general, Chivas logró colarse a la final del Clausura 2017.

Después de dejar en el camino a rivales tan fuertes como Atlas y Toluca, el Guadalajara alcanzó la gran final del fútbol nacional; Chivas logró vencer a unos poderosos Tigres, comandados por quien les diera su décimo título de liga: Ricardo “Tuca” Ferretti. Con este triunfo, Chivas le recordó a todos sus detractores, que los jugadores mexicanos tienen potencial y talento para superar cualquier adversidad.

Ahora, con doce títulos de liga y un palmarés envidiable, Chivas buscará consagrarse y competir por títulos internacionales y, quién sabe, a lo mejor le gana la carrera al América, para mantenerse como el club más importante de México.

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