El séptimo arte ha dado algunas producciones totalmente deportivas, que han logrado cambiar el concepto de diversas disciplinas, en el mundo.
Hoy te contamos las que, para el equipo de Balones y Mujeres, son las cinco más importantes.
Any Given Sunday (Un domingo cualquiera). Si de motivación se trata el entrenador Tony D’Amato, interpretado por Al Pacino, le dio al mundo uno de los discursos más memorables de la historia. Un equipo de fútbol americano se encuentra en declive, con pocas victorias; jugadores veteranos aferrados a seguir con su vida, y una casi imperceptible afición, Any Given Sunday, es lo que necesitas para salir de la depresión.
Slap Shot (Todo vale). El mundo del hockey es por sí mismo violento, y en Slap Shot podrás ver una crítica humorística, de lo que un entrenador debe hacer para que su equipo gane; Paul Newman interpreta a Reggie “Reg” Dunlop, quien busca alejar a su equipo de la mediocridad, sin importar lo antideportivo que pueda ser el medio para conseguirlo.
American Anthem (Himno Americano). Una prominente carrea deportiva se ve mermada por una fractura; esa es la vida de Steve Tevere interpretado por Mitchell Gaylord, un gimnasta que hace a un lado las competencias, para dedicarse a ser entrenador; pero Julie Lloyd, otra gimnasta interpretada por Janet Jones, llega a cambiarlo todo y devuelve a Steve el espíritu deportivo.
The Waterboy (El aguador). Bobby (Adam Sandler), es un asistente del equipo universitario de fútbol, una manera educada de llamarlo aguador, podría resultar una simple comedia, pero a pesar de ser una de las cintas más odiadas de aquellos que difieren con Sandler, es una muestra de que el talento no lo es todo, para obtener un lugar en los deportes.
Rocky. No hay mejor forma de terminar este conteo, todos hemos visto Rocky por lo menos una vez en la vida, Sylvester Stallone dio al mundo una de las sagas deportivas que marcaron a toda una generación; un boxeador de medio pelo con una vida nada honorable, que se encuentra con la suerte de mostrar al mundo lo que una tonelada de esfuerzo y algo de inspiración, pueden hacer.