La violencia dentro del futbol mexicano empezó en la década de los 90, con la llegada de las famosas “Hinchadas” o también conocidas como “Barras Bravas”, grupos de aficionados que apoyan algo en común. Según la definición de la Real Academia Española, un hincha es un partidario entusiasta de algo o alguien, especialmente de un equipo de fútbol.
Lamentablemente estos grupos de animación, en ocasiones llevan más allá el amor a los colores y han sido protagonistas de grandes peleas, las cuales han tenido victimas mortales.
Como la presentada en la cancha del estadio La Corregidora, donde hinchas de los gallos blancos del Querétaro y de los Rojinegros del Atlas fueron protagonistas de la pelea más violenta que se ha dado dentro del futbol mexicano.
Por tal motivo la Federación Mexicana de Futbol en colaboración con el Instituto Nacional de Transparencia y Accesos a la Información (INAI) decidió implementar el Fan ID, una identificación con la cual se le pedirán los datos personales a las personas que asistan a algún estadio de futbol, esto para poder tener un control y mayor seguridad con los asistentes a los partidos.
«Para el próximo torneo vamos a tener implementado este proceso (Fan ID) que puede servir sin Internet y queremos aclarar que no nos vamos a quedar con ninguna base de datos de aficionados, apegados a la protección de datos personales. Hemos invertido mucho trabajo, muchas horas hombre, la inversión que se hará para el software será absorbida por la propia liga», afirmó Mikel Arriola, presidente de la Liga MX.
Además de este Fan ID, también se implementó la credencialización en cada uno de los grupos de animación que ingresen a los estadios, con lo cual se redujo hasta un 50% el número de sus integrantes, confirmándose la hipótesis de que los «aficionados violentos no entregarían su información personal para ser vigilados”, y dando paso a que crezca el número de personas que van con la familia y a pasarla bien.
Fuentes: