Detrás de todas las jugadas, esfuerzo y disciplina que un fanático del básquetbol puede ver, siempre habrá personas que cobran por todo esto y no es que sea malo, la NBA como todas las ligas de cualquier deporte en el mundo es un negocio que da de comer a miles de familias en el planeta y que ahora, gracias al COVID-19, se está viendo afectado de una manera trágica. 

La NBA se vio afectada porque varios de sus jugadores dieron positivo y además tuvo que frenar su torneo por órdenes gubernamentales. Algunos de los jugadores que padecen de este virus son: el francés Rudy Gobert de los Utah Jazz, el alero de 24 años, Christian Wood, del equipo Detroit Pistons, la estrella de los Nets, Kevin Durant, Marcus Smart, el único confirmado de los Boston Celtics, y otros. 

Pero los jugadores enfermos no es el fin del tema para la NBA, sino que ahora tiene que enfrentar el freno a los ingresos, fechas canceladas y mantenimiento de inmuebles, por lo que se ha visto en la necesidad de tomar acciones como el despido de empleados y la reducción de salarios a jugadores.

En un comunicado, la NBA confirmó que, pese a sus deseos, han tenido que prescindir de ciertos empleados. En este informe  jamás se especifica la cantidad de empleados que quedaron en la calle ni sus puestos, sin embargo, mencionan que esta decisión no fue nada fácil. 

El despido de los trabajadores fue algo difícil, sin embargo, ahí no acaba el problema, ya que más de una centena de ejecutivos han reducido su sueldo en un 20 por ciento, además, a partir del 15 de abril, los jugadores comenzarán a cobrar solamente la mitad.

@BalonesyMujeres